Siempre combatimos la judeofobia, la islamamofobia, y todo tipo de discriminación.
Pero no podemos aceptar que con la excusa de una reunión internacional para combatir el antisemitismo funcionarios de nuestro gobierno viajen a Jerusalem. Israel ocupa hace décadas los territorios palestinos, y viola sistemáticamente los derechos humanos del pueblo palestinos. Hace años que venimos denunciando el estado de Apartheid que existe desde el río hasta el mar, en la Palestina histórica. El Apartheid es un crimen y debe ser sancionado tal como establecen las Naciones Unidas en la Convención Internacional sobre la Represión y el Castigo del Crimen de Apartheid, Convención que nuestro país firmó en 1975 y ratificó en 1985. En los últimos dos años organizaciones tan importantes como la israelí B’Tselem, Human Right Watch y Aministía Internacional han coincidido, con importantes y extensos documentos, en condenar el crimen de Apartheid que comete Israel.
Este viaje se realiza en el momento en que la represión israelí dejó justamente en Jerusalem más de 200 heridos y 450 detenidos en una ataque injustificado a la mezquita de Al Aqsa al comienzo del mes musulmán sagrado de Ramadam. Sólo en lo que va de abril más de 20 palestinos han sido asesinados por las fuerzas represivas israelíes.
La Liga Argentina por los Derechos Humanos ha adherido a la condena realizada por el Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino a la visita que realizaron a Israel funcionarios y gobernadores para avanzar en convenios sobre explotación de los recursos hídricos.
Hoy reiteramos: Israel debe someterse a los principios de legalidad y a las convenciones y tratados sobre derechos humanos, así como cumplir las resoluciones de las Naciones Unidas sobre Palestina y sus derechos. Mientras eso no suceda nuestro país, ejemplo en su política de Memoria, Verdad y Justicia, no puede de ninguna forma ser cómplice de un estado que comete crímenes de lesa humanidad.
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